“La esencia de toda religión es ver a Dios en todas las cosas, su voluntad en todo lo que ocurre, su gracia en todo lo que hacemos, su compañía en todo lo que vivimos.
Y a ese reconocimiento esencial nos pueden llevar paso a paso los ángeles con la suavidad eficaz de su constante presencia siempre a nuestro lado y al lado de todos aquellos a quienes encontramos y de todo aquello por donde pasamos.
Cada momento tiene su ángel y como estos ángeles ven siempre el rostro de Dios, el contacto con ellos nos lleva de la mano a la presencia de Dios.”
Carlos G. Vallés
Nos reunimos entre amigas mandaleras y decidimos hacer mandalas de ángeles dada la cercanía a la navidad. Fue un encuentro lleno de inocencia y de volver a sentirnos como niñas. Tras una meditación guiada con este tema sacamos cartas de ángeles y como siempre sus regalos y mensajes dieron en el clavo. Luego cada una empezó la creación de su propio mandala con el tema del angelito.
El adulto en nosotros nos frenaba al comenzar la creación pero luego pudimos fluir y jugar con colores, agua, escarcha, goma, marcadores, etc. Y es que cuando despertamos al niñ@ dentro de nosotros estamos despertando también a nuestro ángel. Nos llenamos de alegría e inocencia al contactar con nuestro ángel, con nuestro niñ@ interno, a través de nuestros mandalas. Y es que vivimos dándole la espalda a nuestro niñ@ interior y a nuestro ángel.
Y al escribir este post cuyo tema es de los ángeles me conecté con aquella época parte de mi camino donde estaba fascinada con el tema angelical tratando de memorizar todas las jerarquías, nombres, atributos, colores, rayos, etc etc que tenía cada tipo de entidad angelical. En cierta manera dándole ese sentido de separación esotérica, de que los ángeles están en el cielo, separados de nosotros. Y la verdad es que visto de esa manera hoy por hoy no me dice mucho, siento que debemos rescatar las virtudes angelicales aquí en este mundo y en esta experiencia humana.
Si nosotros somo el “cielo”, somos “Dios”, entonces también somos “ángeles”. Y nuestra misión sería buscar “adentro” a ese cielo, a ese Dios y a ese ángel que vive en nosotros y quiere manifestarse.
Podemos encontrarnos diariamente con ángeles en nuestro diario vivir, ángeles “disfrazados” de hijos, amigos, hermanos, animales, plantas, etc. que nos traen mensajes, regalos y hasta lecciones de vida. Claro pero no nos damos cuenta pero si empezaramos a percatarnos quizás pudiéramos tener más consciencia de esto.
No deberíamos poner todo el “poder” a los ángeles de todo lo que nos pasa y de cualquier situación o decisión, recordemos que ellos son parte de la existencia, están ahí sin interferir y respetando nuestro libre albedrío. Tenemos la compañía de ángeles, eso es indudable y me consta, pero también hay que reconocer que son parte de nosotros mismos en otra dimensión. Y desde esa perspectiva integradora es que debemos asumirnos como ángeles humanos responsables de nuestro camino y de nuestras decisiones. Siempre que trabajamos internamente creando Luz, creando consciencia, estamos responsabilizándonos no solamente por nosotros sino por toda la humanidad, en definitiva estamos activando al ángel que vive en nosotros.
Despertar el ángel o el niño interno en nosotros es ir profundamente hacia la pureza de nuestro Ser donde no hay juicios sino inocencia y amor incondicional. Por eso creo que es importantísimo trabajar con nuestro niñ@ interno pues ahí hay temas pilares que determinan todo nuestro accionar en la vida.
“Vaya donde vaya, estoy siempre a salvo, estoy rodeado de hermanos,
vivo en el mundo que Dios ha creado y sólo veo ángeles en todas partes”.
FELICIDADES POR TU FORMA DE SENTIR Y PENSAR, TIENES TODA LA RAZÓN, NECESITAMOS SACAR A LA NIÑA O NIÑO INTERN@ QUE CON GRITOS DE AMOR NOS PIDE QUE L@ SAQUEMOS DEL ENCIERRO QUE L@ TENEMOS ….
DARNOS LA OPORTUNIDAD DE CONVIVIR CON NUESTRO SER INTERNO , ES LA COSA MAS HERMOSA QUE PODEMOS EXPERIMENTAR….
DIOS TE SIGA LLENANDO DE BENDICIONES, ABUNDANCIA Y SANACIÓN
Hola Pilar! Gracias infinitas por tus palabras llenas de corazón y buenos deseos!!
Convivir con nuestro ser interno como tú bien dices, es la cosa más hermosa que podemos experimentar y aunque cueste trabajo y disciplina vale la pena vivirlo.
Que Dios también te llene a tí de bendiciones, mucha Luz y Amor!
Un abrazo inmenso
Susana
Precioso lo que dices de los ángeles, son seres que nos ayudan si nosotros realmente queremos, ellos nos dejan actuar, y si les pedimos ayuda , están aquí para ofrecérnosla. Felicidades.
M. dels Àngels.
Agradezco de todo corazón tus palabras sabiendo que vienen de quien trabaja constantemente y amorosamente con la presencia de ángeles.
Un gran abrazo para tí hermana mandalera!
Susana
hola me encanto tu refleccion: te comento que yo vi a mi angel lo vi como una persona comun y corriente bestido de blanco nunca le vi la cara pero venia detras de mi como cuidandome lo mire de reojo y senti mucha seguridad y paz fue algo verdaderamente maravilloso, u cuando lo busque ya no estaba. yo creo en ellos y siempre los invoco porque yo se que siempre estan al pendiente de nosotros en todo, te dejo mi agradecimiento y un afectuoso saludo.
Bienvenida Mary a este blog mandalero y mil gracias por compartir tus vivencias!
Un abrazo grande para tí
Susana
Me encanta este blog, Dios los Bendiga!
Me alegra que te encante este blog y que los disfrutes!
Bendiciones para tí también!
Susana
Hola,no se mucho sobre mandalas,apenas estoy investigando.Grandiosa informacion,he encontrado en tu blog,soy estudiante de terapia gestalt,y me llena de interés todo lo relacionado con crecimiento personal…..gracias,bendiciones para ti,y todo lo que aportas. Mariana La Rosa.
Hola Mariana! qué gusto que hayas disfrutado y aprovechado del blog! Siempre es una alegría saber que mis experiencias con este trabajo resuenan y sirven a los demás.
Un abrazo grande y bendiciones para tí también!
Susana